La Charla contó con la asistencia de unas veinte o treinta personas que se mostraron atentas en todo momento a las explicaciones y participaron con muchas cuestiones al debate generado después.

      Al día siguiente un autobus de la empresa UREÑA salía a las diez de la mañana del "Chorrico" del Paseo de Jesús con rumbo a Jaén para dedicar la jornada a visitar algunos centros culturales de esa ciudad. La convocatoria había superado las espectativas, llevando a cincuenta y cinco porcuneras y porcuneros al viaje y lamentablemente dejando a última hora a algunos sin poder participar por falta de sitio.

    Llegaron a Jaén hacia las 10:45 bajando del autobus en la Plaza de San Francisco junto al edificio de la Diputación. El grupo dió un paseo hasta el Palacio del Marqués de Villadompardo donde dividido en dos grupos pudieron visitar con la explicación de Fernando-Enrique Salas Herrera el Hamman o Baño árabe de los siglos XI-XIII conservado bajo el palacio, también el Museo de Artes y Costumbres Populares y el de Arte Naïf, todos en el edificio del palacio. Hacia las 12:30 volvieron sus pasos hacia la catedral, dando un paseo por el barrio de la Magdalena. Durante ese paseo se habló sobre la historia medieval de aquel territorio y la configuración y evolución de la ciudad.

        Luego en la Plaza de Santa María hacia las 14:00 vieron el exterior de la catedral de Jaén que estaba cerrada. Marcharon a comer a un restaurante cercano donde almorzaron y tuvieron un rato de descanso con una animada conversación de sobremesa.

       Poco antes de las 17:00 el autobus pasó a recoger al grupo para acercarlo a la Plaza de las Batallas para la visita al Museo Arqueológico, para no sobrecargar el esfuerzo de un día de mucho andar y ver, especialmente para algunas personas mayores que iban en el grupo.

        En el Museo visitaron en primer lugar la exposición de Cerrillo Blanco, donde pudieron admirar y admirarse de las Esculturas de Porcuna, suyas por derecho propio aunque expoliadas en Jaén. Muchas personas quedaron sorprendidas al desconocer por completo la magnitud y belleza de estos restos del patrimonio de Porcuna, ya que desconocían su existencia o no las había visto directamente. La sala, un espacio marginal del Museo pese a ser la colección exhibida la más importante, se quedó pequeña para tanta gente. De todas formas Fernando Salas nuevamente les explicó muy por encima y muy llanamente la historia, las certezas y las dudas sobre las esculturas y el yacimiento porcunero. Al final de la visita se hicieron algunas fotos de grupo para dejar constancia de esa visita a su patrimonio exiliado.

        Seguidamente y con la ilusión de sus esculturas y la indignación de que estuvieran saqueadas en Jaén y sus autoridades no quieran devolverlas a Porcuna para hacer algo de justicia, visitaron el resto del Museo Arqueológico, indignándose aún más cuando vieron como los exiguos restos de unas esculturas de mucha menor entidad de la necrópolis del poblado de El Pajarillo de Huelma ocupaban el espacio central del Museo mientras que las sublimes esculturas de Porcuna estaban ocultas en el sótano de un edificio secundario.

        Después de esta clarificadora visita al Museo se tomaron un par de horas libres para dar un paseo, tomar un helado o visitar alguna tienda del centro de Jaén. 

        A las 20:30 horas cogieron de nuevo el autobus, esta vez en la estación de autobuses, encaminándose a Porcuna donde llegaron hacia las 21:15 horas.

     Los organizadores, la Asociación de Mujeres Progresistas "El Despertar Femenino" y ARVIPO se han mostrado muy satisfechos del interés generado por ambas actividades y por sus notables resultados en cuanto al conocimiento y divulgación de la arqueología científica y el patrimonio histórico-cultural de Porcuna entre sus ciudadanos, que son los legítimos dueños y administradores de ese patrimonio, por lo que se plantean nuevas convocatorias para ampliar este tipo de eventos y consecuentemente conseguir una mayor divulgación, formación y concienciación del pueblo para con su historia. En concreto la cada vez más poderosa idea popular de reclamar a las autoridades correspondientes la devolución de las esculturas de Porcuna, así como cualquier otro resto expoliado de su tierra, a donde deben volver, donde tienen sentido.